La asertividad para comunicar mejor en el trabajo

¿A veces te pasa que te comunicas de una determinada forma y luego te sientes mal contigo mismo? O que, en ciertos momentos, ¿te expresas de una forma agresiva que incomoda a la otra persona?

La comunicación asertiva en equipos de trabajo se puede definir como “la capacidad de autoafirmar los propios derechos, sin dejarse manipular y sin manipular a los demás”. Es decir, ser asertivo es la habilidad para expresar tus opiniones de una manera respetuosa hacia sí mismo y hacia los demás. Es una forma honesta, clara y abierta de comunicarte desde el respeto hacia la otra persona.

La comunicación asertiva en equipos de trabajo se encuentra en un punto medio entre la comunicación agresiva y la pasiva. La habilidad de comunicar asertivamente consiste en evitar imponer tus opiniones en un tono y actitud inadecuada o, evitar asumir una posición pasiva, aceptando determinadas situaciones sin expresar tu inconformidad.

Algunas características de la persona asertiva pueden ser: mostrar cercanía y confianza, mirar a los ojos a la otra persona cuando se habla, estar en una postura corporal abierta, ser consciente del lenguaje no verbal, tener una actitud de escucha, y cuidar la calidad de tus intervenciones, entre otras.

Comunicación asertiva en equipos de trabajo

La comunicación asertiva en equipos de trabajo se enfoca en crear un ambiente adecuado para la expresión de ideas, opiniones desde el respeto y la confianza. Dicho ambiente permite expresar de la mejor forma tus pensamientos, sentimientos y opiniones, en el momento preciso, sin que la otra persona se sienta agredida o irrespetada.

6 claves para comunicar con asertividad en equipos de trabajo

  1. Céntrate en el problema y no en la persona. Cuando estas en medio de una discusión, piensa en el mensaje que está transmitiendo la otra persona, y no en quien lo está emitiendo.
  1. Escucha. Pon atención en lo que la otra persona está diciendo, escucha sin preparar la respuesta de antemano, respeta sus tiempos.
  1. Se empático. Que no significa estar de acuerdo, más bien intenta ponerte en el lugar de la otra persona y se receptivo con lo que expresa.
  2. Cuida tu lenguaje verbal y no verbal. Cuida el tono y volumen de la voz, las palabras y también observa tu lenguaje no verbal, tus gestos, expresiones que sean coherentes con lo que dices.
  3. Emplea la estrategia de asertividad de 4 pasos, la cual consiste en:
  • Identifica y describe sin juicios el comportamiento que te molesta del otro de la manera más clara, directa y objetiva posible.
  • Expresa los sentimientos que experimentas ante ese comportamiento.
  • Expresa lo que tú quieres en el otro, tus preferencias –que no son exigencias- por otro tipo de comportamientos
  • Desarrolla tu capacidad para pedir, decir que no y expresar tus sentimientos negativos o positivos.
  • Asume tus propios compromisos y responsabilidad. Pregúntate ¿qué hago yo para que eso sea como es?

La fórmula sería: “Cuando tú haces… yo me siento…… preferiría ………y es por ello por lo que me comporto…”. A continuación, un ejemplo que ilustra esta estrategia.

Paso 1: «Cuando tú me gritas…»

Paso 2: «me siento agredido»

Paso 3: «por ello, te ruego moderes tu tono de voz»

Paso 4: «y yo te haré más caso a lo que me digas.»

 

Te invito a revisar tu comunicación en el trabajo para ser más consciente de tu forma de comunicar y lo que genera en la otra persona. Deja un comentario sobre tu experiencia.

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